Arroz con congrio y alcachofas

Sofreímos un diente de ajo, media cebolla y un poco de pimiento verde. Cuando esté dorado, añadimos el arroz y lo sofreímos un poco para que coja sabor. Añadimos después el congrio, en trocitos, un poco desmigado (yo he usado lo que me sobraba de hacer un caldo, habrá perdido algo de sabor, pero por no tirarlo...). Echamos caldo de pescado hecho en casa y cuando queda poco tiempo para que el arroz esté listo, le añadimos unos corazones de alcachofa de bote.

Verduras asadas en el horno

Ponemos sobre un papel de hornear diferentes verduras. En este caso, calabacín en rodajas, cebolla en juliana, pimiento verde y pimiento rojo picado (porque me había sobrado de otra receta, si no, lo pongo en juliana también) y tomate en rodajas. Añadir sal y una cucharada de AOVE. Controlar el tiempo en el horno, dependiendo de cómo nos gusten las verduras. Al sacarlo, espolvorear con un poco de orégano o las hierbas que nos gusten.

Está muy rico también con berenjena. Si la añadimos, la dejaremos una media hora en rodajas con sal para que elimine el amargor.

Espaguetis con calabacín al ajillo

Lo ideal es cortar el calabacín con una mandolina o con algún aparato específico para esta función. Yo compré uno hace tiempo por muy poco dinero, pero no he logrado adivinar cómo funciona (solo consigo destrozar el calabacín) y otros que he visto en la red me parecen muy caros, así que lo he hecho a mano, con el cuchillo. Como éramos tres a comer se hace un poco pesado y no lo he partido demasiado fino, pero no ha estado mal. (Meses después ya tengo un aparato que me resulta comodísimo y quedan geniales)

Podemos usar solamente el calabacín o como hemos hecho hoy, añadirle unos espaguetis de verdad que hervimos previamente pues necesitan más tiempo. El calabacín se hierve unos tres minutos y después se saltea con muy poco aceite, unos ajos picados pequeños, una cayena y le echamos también pimienta negra molida. Mis chicos le han añadido queso rallado pero yo no porque era parmesano. Un poco de queso light no está de más, pero no tenía. 

Champiñones al micro con jamón serrano

Picamos los champiñones en trozos pequeños. Les añadimos ajo picado, sal y pimienta. Echamos una cucharada de aceite y removemos.  Lo ponemos todo en un recipiente apto para microondas y lo cubrimos con film. Lo hacemos unos tres minutos, sacamos, removemos y ponemos otro par de minutos. Siempre depende de nuestro micro y de cómo nos gusten de pasados. Se puede añadir jamón serrano en alguna ocasión excepcional (como ha sido el caso).

Carne picada con corazones de alcachofa

No hay mucho que contar aquí. Simplemente, sofrío con casi nada de aceite la carne picada que he preparado para las hamburguesas (con ajo picado, perejil y clara de huevo). Cuando está lista, le añado los corazones de alcachofa y lo mezclo todo. Las alcachofas las compro en el Mercadona, que no me paga por hacerle publicidad pero lo digo porque me gustan mucho más que cualquier otra alcachofa enlatada que haya probado. Vienen en plástico y traen mucho aceite pero las dejo un rato en un plato, envueltas en papel absorbente para eliminar todo lo que pueda. 

Patatas "fritas" al horno

Cuando se le coge el punto al horno, estas patatas dan el pego perfectamente. Vale, el sabor no es exactamente el mismo, ni la textura, pero son muy similares a las patatas fritas.

Partimos las patatas igual que si las fuésemos a freír y las ponemos en una fuente, sobre papel de horno. Las rociamos con una cucharada de aceite, salamos y las ponemos unos 20 minutos. Se les pueden agregar hierbas secas al sacarlas, que también están muy buenas.

A veces las meto en una bolsa de las de congelar, con la cucharada de aceite, hierbas varias (romero, tomillo, orégano...), pimentón y sal. Podemos echar lo que queramos. Removemos en la bolsa porque así se impregnan bien y están muy buenas.

Hay que ir controlando para que no se peguen o quemen. Dependerá mucho de cada horno. A mí me ha costado varios intentos pero ahora me quedan como en la foto y todos las comemos así, también los que no están intentando perder peso. 

Ensalada de tomate y mozarella

Al tomate en rodajas, le añadimos mozarella light y un poco de albahaca por encima. Aliñamos con sal, vinagre de Módena y AOVE. No es un plato para comer con asiduidad pues la mozarella, aunque sea light, contiene más calorías que las que ingerimos en otro tipo de ensaladas, pero no está mal darse un capricho que no sea un exceso. 

Bacalao desmigado

El bacalao lo compro fresco con lo cual no tengo que desalarlo. Lo pongo a hervir unos minutos, hasta que esté blando, para poder desmigarlo cómodamente. En una sartén, sin apenas aceite, pocho un poco de cebolla. Si veo que se pega, le añado un poco de agua. Cuando la cebolla está blanda, añado el bacalao y lo mezclo. Lo dejo unos tres minutos y añado una o dos claras de huevo (depende de la cantidad de bacalao), perejil y pimentón dulce. Lo remuevo y listo.

Espirales de pasta con salsa boloñesa

Efectivamente, a priori este plato no parece ser muy ligero, pero como ocurre con otros, esa cuestión la determina la forma de cocinarlo. Si picamos la cebolla y la zanahoria y las ponemos unos minutos en el micro, no necesitan ser rehogadas demasiado, además esto lo haremos con poco aceite. Después, añadimos tomate triturado. Salamos y si queremos quitar un poco de acidez, incorporamos una pizca de azúcar. 

A la carne picada le añadiremos un poco de ajo picado, perejil, sal y pimienta y la dejaremos reposar unas horas antes (o el día anterior). También puede hacerse simplemente salpimentando la carne, pero me gusta más de esta forma. Añadiremos la carne a la sartén de las verduras y el tomate y lo mantendremos a fuego medio-bajo para que se mezcle bien el sabor. Lo dejamos hasta que la salsa tenga la consistencia que queremos. 

Después, simplemente lo mezclamos con la pasta que habremos hervido previamente (yo la hiervo con sal y un poco de laurel). Podemos usar otro tipo de pasta, claro está, pero en esta ocasión, he usado espirales. 

Patatas al micro

Me encanta el toque que da a los platos esta guarnición, por ejemplo a las hamburguesas las mejora sustancialmente.

 Yo la hago para varias personas y uso 300 gramos de patata, 125 de cebolla, un diente de ajo, perejil, 75 ml de vino y unos 50 de agua. 

Partimos la patata en láminas no muy gruesas (o como queramos, a mí es que me gusta así) y la ponemos en un recipiente apto para microondas. Añadimos también la cebolla. En un mortero, preparamos el diente de ajo, el perejil, vino blanco y agua. Lo vertemos sobre las patatas y cubrimos el recipiente con papel transparente. Lo tenemos en el micro unos 8-10 minutos. Depende de cómo nos gusten. Yo lo hago en dos tiempos y entre uno y otro, lo saco y lo remuevo un poco. 

Hamburguesas caseras

Adoro los filetes rusos que hace mi madre, unas hamburguesas rebozadas que son uno de mis platos favoritos. Pero no los solía cocinar en mi casa. Tampoco preparaba hamburguesas, de las que son sin rebozar porque a mi chico le gustan las de la carnicería y las compra a menudo. A mí no me van mucho porque están muy especiadas. El caso es que, como tenía bastante carne picada en el congelador, me he decidido a probar a prepararlas. Y me han encantado.

Tras picar muy finito un diente de ajo, se lo he incorporado a la carne picada. También un poco de perejil (siempre tenemos, picado en el congelador) y una clara de huevo, de las que venden embotelladas en los super. Lo tapo con film transparente y lo dejo un par de horas en el frigo.

Después, simplemente le he dado forma de hamburguesa y lo he frito, sin apenas aceite (solo he untado la base de la sartén con un pincel), en una sartén antiadherente. Apenas se pegan. 

Están un poquito secas pero riquísimas porque como las hemos comido con la guarnición de las patatas al micro, que son jugosas, el resultado final es estupendo. (foto en la entrada de las patatas)

Pisto sin aceite

Obviamente, no sabe igual que el que hacía antes de comenzar a comer sano, que freía cada verdura por separado, como me había dicho que lo hacía mi abuela y además, le añadía patata a veces, pero este tampoco está mal, el sabor es rico. Y supongo que lo mejoraré porque esta ha sido la primera vez.

Partimos en trozos las verduras: pimiento rojo, pimiento verde (no tenía esta ocasión), berenjena, calabacín y cebolla. Yo echo también un diente de ajo y hoy, como me sobraba de la crema que hice ayer, he añadido la pulpa de la calabaza que quedó tras pasarla por el chino. Lo ponemos todo en una cazuela con un poco de agua y vamos dejando que se haga, removiendo de vez en cuando. Cuando va tomando forma, añadimos un poco de tomate triturado, dejamos otro ratito, removiendo y listo. Esta vez me he pasado con el tomate y he echado demasiado. Creo que el resultado será mejor con menos cantidad. 

Pollo con verduras o pollo a los cuatro colores según @jmorsa ;)

Preparamos las verduras en juliana. Las que queramos. En este caso yo he usado zanahoria, pimiento rojo, pimiento verde y cebolla. Las hacemos en un wok, con unas gotitas de aceite. También podemos hacerlas en sartén o prepararlas previamente en microondas, pero a mí lo que más me gusta es el wok. También se pueden hacer con base de salsa de soja en vez de las gotitas de aceite. En ese caso, yo no las salo porque la salsa de soja ya está bastante salada. En cualquier caso, se hacen las verduras hasta dejarlas al punto que nos gusten. A mí, tiesitas, que crujan un poco. 

Apartamos la verdura y sofreímos de igual manera la pechuga de pollo cortada en tiras. Puede hacerse también con otras carnes (con ternera está muy bueno). Cuando esté casi hecho del todo, añadimos las verduras de nuevo para tenerlo un ratito y que se mezclen los sabores bien. Me encanta.

Ensalada de tomates, alcachofas y atún

Encontré esta receta por ahí y me apetecía probarla. No está mal. Se necesita:

Tomates kumato, tomates cherry (yo he cogido variados), alcachofas de bote, atún en escabeche y rabanitos.

Se parten los kumato y se les deja en el frigo con sal durante media hora. Pasado ese tiempo, incorporamos también los cherrys, las alcachofas partidas por la mitad, el atún en lascas y los rabanitos cortados en rodajas muy, muy finas. 

Se aliña con el líquido que hayan soltado los tomates, unas gotas de vinagre de Jérez y un poco de AOVE.

Pollo con verduras y tomate

Se pican las verduras, no muy pequeñas y se ponen en el micro unos cinco minutos para que se vayan haciendo. Depende de días (cojo lo que tenga en la nevera), uso unas u otras pero las básicas siempre son pimiento verde, pimiento rojo, cebolla y zanahoria. Hoy le he añadido champiñones y calabacín. 

Por otro lado, partimos en trozo la pechuga de pollo (para una ración, unos 150 gramos) salpimentamos y doramos en una sartén con muy poco aceite. Añadimos las verduras y mezclamos. Después, echamos una lata de tomate triturado. Salamos y dejamos que cueza todo junto para que coja sabor y el tomate espese un poquito. Se puede echar un poco de azúcar para eliminar la acidez del tomate, si se prefiere.

Pasta con salsa de salmón y champiñones

Me había sobrado un trocito de salmón a la plancha y lo he aprovechado para improvisar una salsa para pasta. En el micro he metido ajo picado con unos champiñones, unos tres minutos. Cuando estaba hecho, lo he mezclado en una sartén, sin aceite, con el salmón que, previamente, había desmenuzado con un tenedor. A esto le he añadido una tarrina pequeña de queso fresco batido desnatado. Una vez cocida la pasta, lo he mezclado todo y he añadido un poco de perejil.

No está nada mal. 

Arroz con alubias verdes (guarnición para salmón al horno)

El arroz blanco lo sofrío previamente con unos ajos picados muy finos, pero apenas echo aceite. Las alubias verdes las cuezo aparte y utilizo esa misma agua para hacer el arroz (si no tenemos preparado un caldo de verduras previamente, que eso es mejor). A las alubias, les hecho una pizca de pimentón y lo remuevo, como si le añadiese un sofrito pero solo lleva el pimentón. Una vez que están así, las incorporo al arroz en los últimos minutos de cocción para que se mezclen los sabores un poco.

Es un primer plato pero yo lo tomo ya acompañado del segundo, como por ejemplo, con este salmón que elaboré en el horno, envuelto en papel de aluminio y añadiendo solo sal y pimienta. En la foto parece mucha cantidad pero los filetes eran finos. Además, solo me comí dos de los tres. 

Tortilla de patatas ligera

La tortilla de patata es una de mis debilidades. La adoro. Podría comerla todos los días de mi vida sin cansarme. Pero engorda una barbaridad si freímos las patatas. Aunque el sabor y la textura no son iguales a los que se consiguen friéndolas, con estas dos formas de prepararla, el resultado es bastante bueno y las podemos comer sin engordar.

Para cada persona uso 150 gramos de patata y un huevo con una clara añadida. Se pone la patata cortada en un recipiente apto para micro. Ya salada. Se cubre con papel transparente. A los tres minutos, se remueve un poco y se pone otro par de ellos, añadiendo ahora la cebolla bien picadita. Lo del tiempo depende mucho de cada micro y de la potencia. Yo lo voy controlando. Cuando esté, lo añadimos al huevo batido y cuajamos la tortilla en una sartén antiadherente con muy poco aceite.

Guiso de verduras

No lo he probado con otras verduras, pero lo bueno que tienen, además del sabor, es que pueden combinarse como más nos apetezca, así que se pueden probar varias combinaciones. Yo uso alubias verdes, berenjena, zanahoria y brócoli. 

Las alubias verdes las hiervo antes porque son más duras. En una sartén, sin nada de aceite, echo la berenjena cortada en cuadraditos, añadiendo un poco de agua para que no se pegue. Después, incorporamos una zanahoria cortada en juliana. Cuando está algo blandito, se le añaden las alubias verdes y por último el brócoli (este no lo hiervo antes). 

Se deja cocer todo unos 20-25 minutos, incorporando un poquito de agua si vemos que se pega, pero no suele ocurrir. Al final, puede añadirse ajo en polvo o unas gotitas de salsa de soja. 

Verduras al horno con vinagre de Módena

Para poner las verduras al horno no hace falta usar ni una gota de aceite. Pueden hacerse utilizando solamente vinagre de Módena y si se quiere, alguna hierba seca para condimentarlas (yo uso tomillo). Yo generalmente utilizo cebolla, pimiento rojo, calabacín, zanahoria y berenjena, pero podemos utilizar las verduras que queramos. 

Las cortamos en trozos y las ponemos sobre la bandeja del horno o un recipiente apto para él. Si lo cubrimos con un papel de horno, nos resultará aún más cómoda la receta. 

El sabor me encanta, sobre todo el de la cebolla y puede tomarse como primer plato, utilizarlo como guarnición o usarlo como base para un revuelto o utilizarlo con un arroz o con pasta.